Día Mundial del Agua: Kimberly-Clark apunta a beneficiar a 1 millón de personas de Latinoamérica en acceso a agua potable y saneamiento básico
- Con el programa Baños Cambian Vidas, desde 2015 la compañía ha logrado impactar la vida de más de 5 millones de personas solamente en la región.
- En Perú, el programa de saneamiento ha impactado a más de 14 mil personas en 103 comunidades.
Con el compromiso de defender un mundo donde todos tengan acceso a agua potable, Kimberly-Clark, multinacional de productos para el cuidado personal, ha invertido en la promoción del saneamiento básico en América Latina, por medio del programa Baños Cambian Vidas. En alianza con Plan International y Water for People, en 2023 la empresa prevé beneficiar a por lo menos 1 millón de personas en la región, con inversiones de más de 1 millón de dólares para mejorar y facilitar el acceso a agua potable en países como Perú, Bolivia, Guatemala, Honduras, El Salvador, Brasil, Colombia y Ecuador.
Un estudio de la Organización de las Naciones Unidas muestra que, a nivel mundial, hay más personas con acceso a teléfonos celulares que a baños. A pesar de ser la región más rica del mundo en términos de disponibilidad de agua potable por persona, América Latina aún tiene un grave problema de saneamiento básico, con 89 millones de ciudadanos sin acceso a baños y desagüe, según WaterData. A nivel local, más de 3.5 millones de peruanos no tienen acceso a la Red Pública de Agua, según un estudio de la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (SUNASS).
Desde 2015, con Baños Cambian Vidas, Kimberly-Clark ha logrado impactar la vida de más de 5 millones de personas en toda América Latina, invirtiendo aproximadamente US$ 5 millones. Solamente en Perú, el programa de saneamiento ha ayudado a más de 14 mil personas en 103 comunidades en las regiones de La Libertad, Lambayeque y Cajamarca. En ese sentido, la empresa también contribuye directamente a la reducción de la contaminación en las cuencas de agua, además de apoyar las comunidades con kits de productos y clases de higiene, salud y conservación en las escuelas.
“Estamos comprometidos con iniciativas diversificadas que funcionen a largo plazo y que cuenten con el potencial para fortalecer a las pequeñas comunidades. Además de construir y mejorar la infraestructura, nuestra alianza con Plan International y Water for People también trabaja para alentar a las poblaciones que viven en las comunidades donde operamos a adoptar comportamientos y prácticas que contribuyan a la promoción de más salud, higiene y sustentabilidad, además de conservar el agua”, comparte Milena Lemos, directora de Medio Ambiente, Salud y Sustentabilidad de Kimberly-Clark para América Latina.
Reducción del consumo de agua en las instalaciones
Kimberly-Clark también actúa para reducir el consumo de agua en sus plantas y procesos de producción. En Latinoamérica, entre 2021 y 2022, el uso de agua se redujo en un 34% en las unidades de la compañía, lo que equivale a un ahorro suficiente para llenar más de 500 piscinas olímpicas.
En Perú, la multinacional invirtió más de US$9 millones en la construcción de una planta de tratamiento de agua en Puente Piedra, en la Región Lima. La implementación de esta fábrica, que funciona con tres reactores biológicos de membrana para la filtración de agua, permitió reducir en un 70% el consumo en la fabricación de productos de papel y en un 40% el uso de agua dulce en las instalaciones.
También hay iniciativas adoptadas en Brasil. En la planta de Mogi das Cruzes, donde los productos de las marcas Neve y Scott son fabricados, aproximadamente el 80% del agua utilizada en la producción recircula y regresa al proceso productivo, mientras que la otra parte es tratada para volver más limpia a los ríos de origen.
Iniciativas similares se adoptaron en las instalaciones de Kimberly-Clark en Santa Cruz, Bolivia, y Sitio del Niño, en El Salvador, donde se llevaron a cabo estudios, auditorías y procesos de concientización de los empleados para identificar problemas que podrían corregirse para evitar desperdicios.
“Nuestro propósito de Un Mejor Cuidado para Un Mundo Mejor nos mueve a seguir buscando distintas medidas que contribuyan a mejorar las comunidades donde operamos. Estamos orgullosos de nuestros logros y entendemos que, para alcanzar nuestras ambiciosas metas globales de sustentabilidad y preservación del agua, cada acción es importante, desde sensibilizar a los empleados para reducir su consumo hasta hacer alianzas para construir y mejorar infraestructuras completas para el saneamiento básico”, concluye Milena Lemos