Cuáles son los beneficios de tener un biohuerto en casa y cómo cuidarlo
En el mundo actual, donde la conciencia ambiental es cada vez más importante, el cuidado del suelo se vuelve fundamental para mantener un equilibrio en nuestro ecosistema. El suelo es un recurso invaluable que nos proporciona alimento y alberga una rica biodiversidad. Por esto, desde hace 60 años, cada 7 de julio se celebra el Día de la Conservación del Suelo, una ocasión para reflexionar sobre la importancia de preservar y proteger este recurso vital.
En esta fecha, se nos recuerda la necesidad de implementar prácticas sostenibles como instaurar biohuertos en casa, con el fin de preservar y promover la salud de nuestro planeta. En ese sentido, Juan Loayza, Gerente de Proyectos en Besco, nos señala los beneficios de cultivar en nuestro hogar.
1. Comer saludable: Al tener control sobre los alimentos que cultivamos y la tierra que usamos, podemos comer de forma más saludable; ya que consumiremos frutas y verduras libres de pesticidas.
2. Refrescan el ambiente: Las plantas ayudan a reducir el calor, porque pierden agua durante la transpiración, lo que enfría el aire que las rodea, dejándolo purificado y fresco; de esta manera, crean un entorno más agradable.
3. Mejora la calidad del aire: Las plantas purifican el aire al producir oxígeno y capturar el polvo, las partículas de humo y otros contaminantes. Además, absorben los productos químicos nocivos sin necesidad de utilizar electricidad.
4. Beneficios físicos y psicológicos: Las investigaciones demuestran que el contacto con la naturaleza promueve la reducción del estrés y mejora la atención y la memoria. Además, la presencia de plantas es relajante y puede mejorar el estado de ánimo.
5. Conexión con la naturaleza: Cultivar un biohuerto en tu departamento te conecta con la naturaleza y te permite estar en sintonía con los ritmos naturales de cada estación.
¿Cómo cuidar los biohuertos?
Ahora que sabemos todos los beneficios que trae implementar biohuertos en casa, Loayza también nos indica lo que debemos tomar en cuenta para su cuidado.
1. Conocer las necesidades de riego: Conocer las necesidades de riego de las plantas permite establecer una rutina adecuada y adaptada a cada una de ellas. También es fundamental mantener un nivel apropiado de humedad del suelo, ya sea mediante el uso de pulverizadores o bandejas.
2. Alimentar las plantas adecuadamente: Durante la temporada de crecimiento, las plantas requieren fertilizantes que contengan nutrientes esenciales como nitrógeno, potasio y fósforo, por lo que se recomienda aplicar compost que también sirve para mejorar la textura del suelo.
3. La exposición al sol: Es importante considerar la exposición al sol de cada planta, ya que algunas requieren más luz solar que otras. La mayoría crecen bien con luz indirecta, mientras que otras prefieren al menos 6 horas de sol al día.
4. Controlar las plagas: Podemos evitar las plagas asegurándonos de que la tierra esté sana, cultivando variedades resistentes, rotando los cultivos, asegurándonos de que las plantas reciban luz solar y cubriéndolas para protegerlas. La prevención es crucial, ya que es más fácil que tratar una infestación. En caso se presente una, la plantación de hierbas repelentes y la aplicación de plaguicidas o repelentes caseros ayuda a controlarlas.
5. Semillas fáciles de cultivar: Las lechugas crecen durante todo el año y se pueden cosechar en tamaños pequeños. Los tomates son indispensables en muchas comidas y se siembran en tierra cubierta con hojas secas. Las zanahorias se cultivan en tierra suelta y arenosa durante primavera y otoño. Las espinacas crecen rápidamente y se siembran en hileras o bloques, recolectando las hojas según sea necesario. Las arvejas crecen bien en cualquier época del año y fijan el nitrógeno a medida que crecen. Con cuidado adecuado, podrás disfrutar de estos cultivos en poco tiempo.