5 mitos de la banca por componentes, el motor de la transformación financiera
Este enfoque modular posibilita a instituciones financieras de cualquier tamaño elegir proveedores específicos para crear ecosistemas digitales alojadas en la nube, que se integren de manera rápida y eficiente.
Los líderes de las instituciones financieras deben enfrentar una serie de obstáculos para adaptarse a la transformación digital, al mismo tiempo que navegar en un mercado en constante evolución. Mambu la plataforma de core bancario 100% digital nativa en la nube, bajo modelo SaaS y líder en Latinoamérica, además de ser recientemente reconocido por tercer año consecutivo dentro de la lista ‘The Cloud 100 2023’ de Forbes, comparte un análisis exhaustivo de los mitos más arraigados sobre la banca por componentes, desmintiendo conceptos obsoletos y resaltando las ventajas de adoptar este innovador enfoque.
Los avances tecnológicos han demostrado ser un excelente medio para agilizar y hacer más eficientes las tareas, no obstante, la amplia variedad de modelos y ofertas en el mercado puede resultar abrumadora para las entidades financieras y los tomadores de decisiones. Esto se debe a que los aspectos técnicos y las características individuales de cada componente pueden plantear desafíos relacionados con regulaciones, gestión de datos, incompatibilidades y proyectos de integración.
“El concepto de ‘banca por componentes’ ha surgido como la solución para numerosas instituciones financieras. Este enfoque modular, similar a los bloques de un juego que se ensamblan perfectamente entre sí, posibilita a las organizaciones elegir proveedores específicos para soluciones particulares alojadas en la nube, que se integran de manera rápida y eficiente en el core bancario. Esto simplifica las operaciones en la cadena de valor y dirige la atención hacia el negocio y la experiencia del cliente”, señala Paula Neira, Market Director de Mambu para Latinoamérica.
Frente a los desafíos que conlleva esta innovación, es importante revisar 5 mitos que existen alrededor de la banca por componentes, que puede ayudar a empresas que prestan servicios financieros a avanzar en sus procesos de transformación digital.
● Mito #1. Un único proveedor es mejor que una arquitectura por componentes: En un mundo donde la velocidad y adaptabilidad son esenciales, un solo proveedor no puede innovar en todos los frentes al mismo tiempo para estar a la vanguardia del mercado. Por el contrario, la arquitectura por componentes ofrece flexibilidad y agilidad, lo que permite a las instituciones financieras seleccionar los mejores componentes para satisfacer necesidades específicas y contar con socios de consultoría para abordar proyectos, superar obstáculos y enfrentar nuevos desafíos.
● Mito #2. La banca por componentes es más costosa: Una mirada más detallada revela que la arquitectura por componentes puede reducir significativamente los costos en comparación con las soluciones tradicionales de proveedor único. De acuerdo a la consultora de tecnología CapGemini, reemplazar el core bancario con una solución de última generación puede reducir los costos de IT en un 9%, lo cual para el promedio de un banco latinoamericano, se traduce en un corte de costos de entre 3 y 5 millones de dólares por año. Además, la implementación de soluciones modulares optimiza el tiempo de lanzamiento al mercado entre un 45% y 65%, aumenta la productividad y disminuye la necesidad de recursos especializados.
● Mito #3. La banca por componentes es menos confiable: La percepción errónea de que un solo proveedor garantiza una mayor resiliencia operativa es desmentida por la realidad. La banca por componentes ofrece un enfoque de ‘lo mejor en su clase’, permitiendo a las instituciones financieras seleccionar las soluciones más seguras y de mejor rendimiento.
Esta arquitectura en la nube les permite recuperarse de las crisis aproximadamente 2,5 veces más rápido que aquellos que no operan bajo un modelo SaaS, además de cumplir con estándares de seguridad cibernética avanzada y normativas internacionales. Mientras tanto, los sistemas de proveedor único pueden quedar atrapados en la falta de recursos y opciones para mitigar el riesgo.
● Mito #4. Un modelo por componentes presenta mayor riesgo de entrega que las arquitecturas monolíticas: La arquitectura por componentes mitiga el riesgo al posibilitar una modernización gradual. Los componentes individuales pueden ser reemplazados o actualizados sin afectar la totalidad del sistema, lo que disminuye el riesgo de tiempos de inactividad y cortes en el servicio. Además, la configuración y la reutilización de componentes facilitan un enfoque más eficaz y seguro.
● Mito #5. La diferenciación requiere un código personalizado: La adaptación de productos y servicios financieros a las necesidades cambiantes puede lograrse de manera eficiente a través de la configuración en lugar del código personalizado. Este enfoque agiliza la respuesta a las condiciones del mercado y reduce costos y complejidad.
“La banca por componentes desafía ideas comunes y emerge como un enfoque ágil y efectivo para enfrentar los desafíos de la industria financiera. Imagine un potente motor único que se integra perfectamente en sistemas internos, con altos índices de eficiencia. A través de mejoras continuas y actualizaciones en la nube, este motor puede integrar servicios extra relevantes para los clientes. Esta visión se convierte en realidad al dejar atrás prejuicios y explorar a fondo la banca por componentes, una solución ideal para abordar los retos de la transformación digital a un ritmo vertiginoso”, concluye Paula Neira, Market Director de Mambu para Latinoamérica.