¡Atención! ¿Sabías que al aumentar en dos grados la temperatura de tu casa se genera un 7% más de consumo en tu fuente de calor?
Evitar las pérdidas de calor, aprovechar la luz natural, instalar tragaluces, realizar la mantención de estufas y calefacción, entre otros, son consejos que te ayudarán a ahorrar en energía eléctrica.
El alza en el costo de la energía eléctrica es un tema que ha generado gran revuelo en nuestro país en los últimos días, ya que tanto los hogares particulares como las mipymes y pymes, se verán fuertemente afectados por esta decisión que ataca directamente los bolsillos y en pleno invierno.
Es por esto que tomar algunas medidas para disminuir el gasto energético y optimizar el uso de estufas y calefactores es una gran idea para combatir esta problemática.
“Un dato esencial que hay que tomar en cuenta es que al aumentar en dos grados la temperatura de tu fuente de calor, se genera un 7% más de consumo en esta, por lo que va a ser primordial mantener siempre una temperatura homogénea y no cambiarla durante el día”, asegura Jorge Escalona, jefe de carrera de la Escuela de Construcción del Instituto Profesional Iplacex.
Para esto, el experto aconseja mantener la temperatura entre 18 y 20 grados durante el día y bajarla a 15 grados por la noche o cuando la casa esté vacía. “En este caso, instalar un termostato inteligente puede ser útil para controlar esta temperatura de manera automatizada”, agrega Escalona.
Por otro lado, realizar periódicamente mantenciones a las estufas o calefacción, ubicar estos electrodomésticos alejados de puertas y zonas en donde se genera pérdida de calor, aprovechar al máximo la luz natural del día que ayuda a aumentar la temperatura, si es posible instalar tragaluces para aumentar el reflejo del sol y elegir colores que irradien la luz solar, son otros consejos que serán útiles en estos casos.
Por último, para aquellos que no quieren gastar mucho en calefaccionar su casa, el especialista de Iplacex recomienda fijarse en “las puertas ya que generan un pequeño espacio en la parte inferior, por lo que debemos crear una barrera que impida que el frio entre. Como solución podemos fabricar un burlete a partir de ropa en desuso y relleno de espuma o algodón”.