Tecnología ginecológica y obstétrica: Pilares para la salud de peruanas
Por: Guillermo Lem, Region Manager (LCT) para Colombia, Perú y Puerto Rico (PCP) GE HealthCare
En los últimos años, el campo de la ginecología y obstetricia ha experimentado una transformación significativa, impulsada por los avances tecnológicos, que han permitido el desarrollo de equipos y métodos de diagnóstico más precisos y menos invasivos. Herramientas como el ultrasonido de alta resolución, las técnicas de imagen por resonancia magnética y los sistemas de monitoreo fetal avanzados son claro ejemplo de la revolución que viven estas especialidades médicas en la región y el país.
En el Perú, la práctica de diversas técnicas y/o herramientas tecnológicas en el campo de la ginecología y obstetricia inició en el siglo XX, permitiendo mejorar sustancialmente la anticipación y calidad de los diagnósticos, los procedimientos, las terapias y el seguimiento de diversos procesos fisiológicos y patológicos que se realizaban en el país[1]. Mientras que actualmente, los sistemas de salud público y privado cuentan con diversos equipos para brindar un correcto diagnóstico temprano a las mujeres peruanas de diversas edades.
Dichos equipos, que integran tecnología avanzada, proporcionan precisión en el diagnóstico, el cual es fundamental para la prevención y el tratamiento de enfermedades ginecológicas. La implementación de ecógrafos de última generación permite a los profesionales de la salud detectar anomalías fetales con mayor antelación y precisión, facilitando la intervención temprana y mejorando los resultados tanto para la madre como para el bebé.
Además, las nuevas tecnologías de biopsia y pruebas genéticas permiten identificar riesgos de cáncer ginecológico de manera más efectiva, lo que es vital para la salud de la mujer peruana, dado que el cáncer de cuello uterino y el cáncer de mama siguen siendo prevalentes en nuestro país, ya que según el último informe Globocan 2022 se tienen identificados aproximadamente más de siete mil casos de mujeres con diagnóstico de cáncer de mama y más de cuatro mil con cáncer de cérvix[2].
En este contexto las empresas del sector sanitario, como GE HealthCare, desempeñan un papel clave en garantizar el acceso a la salud para las mujeres. Como líderes en innovación y desarrollo, las compañías tenemos la capacidad única de impulsar iniciativas que promuevan la incorporación de nuevas tecnologías de alta precisión que se ajusten a una variedad de presupuestos y necesidades en la salud peruana, con sistemas innovadores que proporcionen la mejor atención posible a las mujeres y sus bebés.
En junio, mes en el que se conmemora la labor de los médicos y profesionales de la salud dedicados a la ginecología y obstetricia en el país, destacamos su trabajo incansable para asegurar que todas las mujeres peruanas y sus bebés tengan acceso a la mejor atención. Como empresa privada del sector tenemos la misión de llevar tecnología de calidad e innovación para la salud de precisión y mejorar el cuidado de los pacientes.