Cáncer de Piel: 4 cosas que debes saber
Las vacaciones en verano hacen que disfrutes del sol al aire libre, ya sea por deportes, viajes o alguna diversión familiar y, al mismo tiempo, aparece la amenaza del cáncer de piel por la excesiva exposición a la luz solar sin protección.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que cada año se diagnostican alrededor de 3 millones de casos de cáncer en todo el mundo, cifra que se ha incrementado debido a malos hábitos y al crecimiento de los niveles de radiación ultravioleta. De cada 100 casos diagnosticados de cáncer, 6 corresponde a cáncer de piel, por lo que la incidencia de esa neoplasia ha crecido junto con la práctica de diversas actividades al aire libre.
Los principales tipos de Cáncer de Piel son el carcinoma basocelular, el carcinoma epidermoide y el más agresivo el melanoma. El Dr. Yan Carlos Vargas, médico radiooncólogo y director de ONCOMEDIC, te brinda 4 datos que debes saber para proteger la piel de manera correcta esta temporada.
- Sobreexponerse a los rayos del sol produce cáncer de piel.- La radiación ultravioleta es uno de los principales factores de riesgo en esta enfermedad, provoca daños acumulativos en el cuerpo que perjudican la salud.
- Es hereditario el cáncer de piel.- Es posible que entre los genes de padre a hijo el riesgo a desarrollar esta enfermedad se pueda traspasar. Las cifras indican que 1 de cada 10 personas con melanoma tiene antecedentes familiares.
- El color de piel y ojos aumenta el riesgo de padecer cáncer de piel.– Por genética aquellas personas que tienen el cabello rubio, piel de tez blanca y ojos de colores más claros, tienen el riesgo mayor de desarrollar esta enfermedad.
- Los lunares nuevos hacen que surja el cáncer de piel melanoma.- Una gran parte de los tumores melanomas, surgen de los lunares que aparecen recién y no con los que uno nace. Por otro lado, las personas que cuentan con más de 100 lunares en la piel tienden a desarrollar algún tipo de cáncer.
“Cabe indicar que es importante una vez al año realizarse un chequeo dermatológico para evaluar cambios sospechosos en la piel que podrían ser manchas con dolor, picazón o sangrado, lunares que sangran o son anormales”, comenta el médico.
