¿Cómo el sector salud puede contribuir a la acción climática?
- El sector de la salud produce un 4.4% al total de emisiones globales. Por eso, para lograr la reducción del impacto ambiental, el sector ha trabajado en reducir el consumo de energía, hacer una transición a energías renovables, y promover el uso de energías limpias.
Las crisis climáticas también tienen impacto en el bienestar físico, tanto así, que en la medida en que la temperatura global aumenta un grado centígrado, el riesgo de mortalidad aumenta hasta un 5,5%[1]. De allí que los cambios climáticos pueden empeorar la prevalencia de las enfermedades infecciosas, desde virus comunes hasta enfermedades mortales como la peste.
El Panel Internacional sobre el Cambio Climático (IPCC), por su parte, también ha confirmado las implicaciones que pueden tener factores como la contaminación del aire y del agua sobre el estado de salud del ser humano. En la medida en que las temperaturas y las olas de calor aumentan, el estrés por la condición ambiental también incrementa. Esta condición de estrés físico puede provocar enfermedades cardiovasculares, respiratorias o reumáticas en poblaciones riesgosas como lo son personas mayores, niños pequeños y personas con enfermedades de base.[2]
Ahora bien, se sabe que el sector de la salud produce un 4,4% al total de emisiones globales[3]. Por eso, para lograr la reducción del impacto ambiental, el sector ha venido trabajando en reducir el consumo de energía, hacer una transición a energías renovables, y promover el uso de energías limpias para la realización de diferentes actividades.
Algunas acciones que se pueden realizar para reducir emisiones indirectas pueden ser:
- Mejorar los equipos médicos para que sean más eficientes energéticamente teniendo en cuenta que las emisiones médicas contribuyen con un 10% de la huella de carbono total de la atención médica[4].
- Producir y usar medicinas y productos químicos de manera responsable, ya que estas producciones consumen altas emisiones de carbono. Por eso surge la necesidad de que las industrias farmacéuticas adopten estrategias más sostenibles.
- Trabajar por una economía circular que reduzca los desechos y es allí donde los hospitales pueden aplicar prácticas como el reciclaje, el compostaje, la reutilización y la reducción de residuos, y por otro lado, prolongar la vida útil de los equipos.
- La inteligencia artificial hoy en día también puede ser una herramienta útil para la reducción de emisiones puesto que ayuda en la construcción de imágenes y esto puede reducir el consumo en un 60%, también se minimiza el margen de error y la necesidad de volver a ensayar.
“El sector salud ha mostrado un compromiso con la acción climática que se ha visto reflejado en las medidas tomadas que buscan esta reducción significativa de la huella de carbono, demostrando que la salud y la sostenibilidad se potencian mutuamente. Creemos que un planeta sano es esencial para la salud de las personas, y es por ello que desde el área de desarrollo de dispositivos tecnológicos en salud seguimos trabajando para contribuir a la construcción de un futuro más sostenible para todos” mencionó Francisco Vélez, director general de Siemens Healthineers para Colombia, Perú y Ecuador.