EMPATÍA POR LA VIDA: LA MADRE TIERRA COMO LA PRINCIPAL MAESTRA
Joaquín y Tatiana tienen algo en común: iniciaron sus actividades en el cuidado de la naturaleza en Madre de Dios. Ambos se dedican aún a ello y es porque desde niños disfrutaron juegos similares: Joaquín en el jardín de su abuela en Barranco jugaba que los perros eran leones y él era el tarzán de la selva, mientras que Tatiana era la exploradora que trepaba los árboles del parque frente a su casa en Bellavista. El contacto regular con la naturaleza estimula actitudes para valorar la vida y contribuye a mejorar la relación de los seres humanos con el planeta.
Una resolución emitida por el Ministerio del Ambiente al finalizar el 2022 invita a “Reconocer a la madre tierra como maestra en el fomento de la educación ambiental para la formación de valores, actitudes y empatía ambiental en favor de la vida y la naturaleza”. Esta es una muy buena noticia para celebrar en el día de la educación ambiental.
Joaquín Leguía fundador de ANIA, Asociación para la Niñez y su Ambiente, ha trabajado arduamente para promover a la naturaleza y la madre tierra como maestra en las instituciones educativas y así empoderar a las niñas, niños y jóvenes como agentes de cambio. Él ha sido el artífice para el logro de este reconocimiento.
Tatiana Espinosa fundadora de ARBIO Perú, organización dedicada a proteger los bosques en peligro por la deforestación en Madre de Dios, señala que es vital que el sector educativo lidere la empatía y cuidado de la naturaleza para cambiar patrones de consumo que destruyen ecosistemas como el bosque amazónico.
Joaquín y Tatiana son amigos ahora y ambos disfrutaron desde niños al jugar rodeados de naturaleza. Joaquín creó el concepto de Tierra de Niños, una metodología para la educación escolar y Tatiana protege un bosque donde se conservan árboles milenarios como el Shihuahuaco que llegan a tener hasta más de mil años de edad.