INEI: 32% de jóvenes entre 15 y 29 años con problemas de salud mental
En lo que va del 2023, se han registrado aproximadamente 7 mil casos de violencia escolar. Las cifras representan realidades dolorosas: desde escolares que editan imágenes obscenas de sus compañeras hasta trágicos casos de suicidio en centros universitarios, pasando por episodios de violencia escolar que son miles de casos. Ante este panorama, surge una pregunta ineludible: ¿es esto el reflejo de una salud mental desatendida en los jóvenes?
En una entrevista, Karen Pérez Maraví, quien es especialista en psicología y psicoterapia, docente de la Escuela de Posgrado de la Universidad Continental y Sub Directora Nacional de la carrera de Psicología de la misma institución, nos comparte aclaraciones sobre la situación de la salud mental en adolescentes.
Un aumento post pandemia en problemas de salud mental
La pandemia por el COVID-19 ha impactado profundamente en la salud mental de los jóvenes, exacerbando problemas como la depresión, la ansiedad y trastornos del comportamiento. Datos recientes revelan que uno de cada siete jóvenes de 10 a 19 años padece algún trastorno mental. Según últimos informes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que el suicidio es la cuarta causa de muerte entre los jóvenes. En el año 2022, el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) indicó que el 32% de los jóvenes entre 15 y 29 años se enfrentaba a problemas de salud mental.
Los trastornos mentales no tratados a tiempo pueden tener consecuencias devastadoras, afectando la vida adulta de los jóvenes. Según la OMS, el suicidio cobra más de 800.000 vidas al año en todo el mundo. Las causas detrás del suicidio adolescente incluyen trastornos psicológicos, altos niveles de estrés emocional, y problemas como el bullying, el ciberbullying y el sexting.
Factores de riesgo que impactan en la salud mental
La salud mental de los adolescentes se ve influenciada por una serie de factores, y cuanto más acumulativos sean estos factores de riesgo, mayor aumenta la vulnerabilidad de los jóvenes. Entre los principales factores se encuentran: la violencia, la pobreza, la estigmatización, la exclusión y la vida en entornos frágiles o de crisis humanitaria. También, las redes sociales, las normas de género impuestas, la calidad de la vida familiar y los problemas en la crianza también pueden ser factores de riesgo.
La adolescencia como etapa clave
La adolescencia es un período crítico en el desarrollo de hábitos sociales y emocionales. Según la especialista, los adolescentes necesitan un entorno favorable que incluya apoyo en la familia, la escuela y la comunidad. Esto implica promover patrones de sueño saludables, ejercicio regular, habilidades para mantener relaciones interpersonales, resolución de problemas y gestión emocional.
Prevención del suicidio
La prevención del suicidio se ha convertido en un desafío universal en la promoción de la salud mental. La implementación de programas de educación emocional en las escuelas y la detección temprana de problemas emocionales y conductuales en el hogar son cruciales. Además, el desarrollo de políticas públicas de salud mental que garantizan el acceso a la atención de salud mental, promueven el aprendizaje socioemocional y protegen contra la adversidad son esenciales.
¿Qué debemos hacer?
Como sociedad, se debe mantener la sensibilidad y la empatía ante los problemas de salud mental en los jóvenes. No se puede permitir que se normalicen estos problemas. En su lugar, se debe tomar medidas preventivas desde los hogares con la escucha activa y en las escuelas con la promoción de la salud mental.
La salud mental de los jóvenes es un asunto de suma importancia, y requiere una respuesta colectiva y comprometida para asegurar un futuro más saludable y equitativo para esta generación, concluyó la especialista Pérez.