Por primera vez médicos del Hospital Arzobispo Loayza realizan angioplastia de tronco coronario izquierdo
Procedimiento invasivo de alta complejidad salvó la vida de un paciente de 74 años.
Primitivo Cortez Vargas llegó al Hospital Nacional Arzobispo Loayza (HNAL) del Ministerio de Salud (Minsa), con una crisis hipertensiva y un intenso dolor torácico. Tras una evaluación y diversas pruebas, se determinó que presentaba una obstrucción casi total en el tronco de la arteria coronaria izquierda, el vaso sanguíneo que irriga aproximadamente el 75 % del corazón, esta condición representaba un alto riesgo de infarto, requiriendo de una angioplastia de tronco coronario izquierdo, procedimiento que se realizó por primera vez en este hospital, informó el cardiólogo intervencionista, Jean Carlo Mayta Calderón.
Este procedimiento de alta complejidad estuvo a cargo del Servicio de Cardiología y Cuidados Coronarios, permitió destapar arterias bloqueadas y mejorar el flujo sanguíneo del paciente de 74 años, quien presentaba una obstrucción severa que ponía en riesgo su vida. Gracias a esta acción inmediata, el paciente pudo evitar una cirugía a corazón abierto y ahora está recuperándose satisfactoriamente.
El procedimiento duró aproximadamente una hora, y consistió en la inserción de un catéter con un balón que dilató la arteria obstruida, seguido de la colocación de un stent (dispositivo médico que se implanta en una arteria, vena u otro conducto corporal para mantenerlo abierto), para garantizar el flujo sanguíneo adecuado. “Fue un procedimiento exitoso y sin complicaciones durante la intervención. La técnica utilizada permite una recuperación más rápida y reduce significativamente los riesgos asociados a una cirugía mayor”, agregó el doctor Mayta Calderón.
Además, explicó que se optó por una angioplastia en lugar de una cirugía de bypass coronario, ya que la lesión suboclusiva (bloqueo parcial de un órgano tubular) se podía tratar mediante un abordaje mínimamente invasivo, lo que permitió evitar una cirugía de tórax abierto y reducir el tiempo de recuperación.
Es fundamental que los pacientes con factores de riesgo como la hipertensión arterial, diabetes, personas con malos hábitos de tabaco y alcohol se realicen chequeos preventivos y adopten hábitos saludables para evitar complicaciones cardiovasculares.
